No paró hasta que consiguió reducir en un 64% la tasa de violencia doméstica en el Reino Unido en 2009. Comprometida con la causa, la baronesa Scotland, exfiscal general de Inglaterra y Gales, visitó Casa África para impartir un taller a funcionarios, técnicos y oenegés sobre su método para plantarle cara a esta lacra. La clave: emprender un plan nacional y local de todos los agentes sociales.
Patricia Scotland
Baronesa Scotland y exfiscal general del Estado en el Reino Unido
“Mi plan contra la violencia machista puede salvar vidas y ahorrar dinero”
Eva Rancho
LA PROVINCIA / LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 7 Junio 2014
Como promotora de la Fundación Global para Eliminar la Violencia Doméstica (Global Foundation to Eliminate Domestic Violence), impartió ayer un taller para funcionarios canarios sobre su método de trabajo, aplicado en más de 100 países para abordar esta lacra social. ¿Cuáles son sus pilares?
Lo primero es ser capaz de identificar las necesidades de cualquier país. Lo segundo, cómo se manifiestan los problemas, cuánta gente, dónde están, su edad, para que sepas cuántos mayores, jóvenes, cuántas personas gays, heterosexuales… para que realmente seas capaz de planificar la ayuda. Después necesitas ordenar todas las agencias, instituciones y personas individuales que están ya trabajando en este campo, qué están haciendo, mirando lo que la administración local, las agencias, el Gobierno central, las ONG han estado gastando hasta ahora en todo esto. Una vez hecho esto, puedes ver las brechas donde la ayuda no ha llegado, y poner un plan estratégico nacional, regional o local conjunto, de forma que todos las personas que están buscando abordar este tema lo puedan hacer con mayor creatividad en cooperación con otros. Lo importante es cómo abordas este asunto heterogéneo con un respuesta multidisciplinar, que es lo que necesita este problema.
¿Hay realmente una verdadera voluntad política para extirpar este problema social? ¿Qué más se debe hacer en los centros educativos, familias…?
Creo que lo que hemos hecho en el Reino Unido, y lo que hicimos desde la fundación EDV, es una metodología que capacita a la gente que está comprometida con este cambio para lograrlo. Pero significa que todos nosotros tenemos que elegir hacerlo, y creo que hay mucha preocupación por si no hay suficiente dinero, si esto sería demasiado difícil o complejo. Y espero que lo que hemos hecho demuestra que puedes salvar vidas y ahorrar dinero, porque la aplicación de este enfoque tiende a maximizar el impacto de cada libra o euro que se gasta, porque te estás asegurando de que lo estás gastando sólo una vez. Reduces que se duplique, se solape, reúnes a toda la gente, entonces la forma en que trabajas es la más eficaz y eficiente.
“Para programar la ayuda, hay que ver las necesidades del país y cómo se manifiestan los problemas”
Tras su lucha en 2009 contra la violencia doméstica, se publicó que la tasa en el Reino Unido se redujo en un 64%. ¿Cómo pudo lograrlo?
Lo hicimos básicamente entendiendo cuánto dinero ya estábamos gastando, entonces hicimos una evaluación económica antes de empezar este trabajo, y encontramos que estaba suponiendo al Reino Unido 23 billones de libras al año, pero 17 billones era el coste económico, es decir, que estaban pagando los daños y pérdida sufridas, que es realmente la cantidad que alguien pagaría para no sufrir esto. Pero si lo desglosas, 3,1 billones fue dinero en efectivo que el Gobierno central y local gastó, y 2,7 billones fue la pérdida de rentabilidad de empresas. Entonces si juntas esas dos cifras, tendrías por lo menos 5,8 billones, y fue el dinero tangible que se estaba gastando.
La tasa de violencia doméstica en Dinamarca es sobrecogedora. Según una reciente encuesta de la Agencia Europea de Derechos Fundamentales (FRA), 52% de las mujeres danesas creen haber sufrido violencia física o sexual, una cifra mucho más alta que la media europea, un 33%. ¿A qué se debe?
Desgraciadamente todos los países en nuestro mundo la tienen como parte del ADN en la forma de actuar de la gente. De acuerdo con la OMS, una de cada tres mujeres en el mundo sufrirá violencia sexual y física, y no incluye emocional, psicológica, financiera. Creo que es importante mirar cada país y entender los mecanismos que conducen a ello en un área u otra. Lo que hemos encontrado es que si tienes una respuesta holística, no importa el nivel, la violencia desciende. Puede diferir en cada país por razones culturales o nacionales, pero lo que hemos descubierto es que su base es idéntica y afecta a todos los sectores.
¿Qué diría a los políticos que reducen el presupuesto para combatir este problema debido a la crisis económica?
Les diría que tienen la opción de elegir cómo lo cortan. Todos estamos en una difícil situación financiera, pero si adoptaran un enfoque que intervenga temprano en este tema, ahorrarían mucho dinero. Por cada libra que gastamos en ello, ahorramos seis. Entonces esto es realmente invertir para ahorrar. Y si eres inteligente, serás capaz de trabajar de una forma que propiciará el cambio en la práctica.